¿Qué es “The Bloop”?
Fue el nombre dado a un sonido de
frecuencia ultra baja y muy potente procedente del fondo marino detectada por
la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) durante 1997.
Según decía la descripción oficial, “el sonido se elevaba rápidamente en
la frecuencia durante aproximadamente un minuto y de una amplitud suficiente
para ser escuchada en múltiples sensores, a una distancia de más de 5.000 km
cada uno”. Sin embargo, Bloop es mucho más que una simple palabra extraña, es
un sonido misterioso que levantó una gran controversia en el propio seno de la
comunidad científica. Para algunos, no es más que el evidente sonido del hielo
rompiéndose y de las grietas del océano del sur, pero para otros continúa
siendo un misterio que va mucho más allá de lo comprensible.
El sonido era consistente con los ruidos generados por ice
quakes de grandes icebergs, o grandes icebergs raspando el fondo del océano,
pero en 2002 se dijo que también sería compatible con enormes animales marinos.
La NOAA considera que estableció un análisis concluyente y que el ruido estaba
relacionado con hielo.
ORIGEN DEL BLOOP
Durante la Guerra Fría, la marina de los Estados Unidos
construyó una amplia gama de submarinos con dispositivos de escucha con el fin
de detectar y rastrear submarinos nucleares soviéticos. Estos hidrófonos se
colocaron a aproximadamente a 5.000 kilómetros de distancia en la capa profunda
del mar, conocido como el canal del sonido profundo, donde las bajas
temperaturas y las altas presiones permiten que las ondas sonoras se propaguen
a grandes distancias. Cuando terminó la guerra fría, en lugar de suspender la
actividad del Sistema de Vigilancia de Sonidos (SOSUS), la Marina de los
Estados Unidos prestó la tecnología militar a la ciencia.
La matriz fue utilizada para rastrear eventos fascinantes,
como las migraciones de ballenas, los terremotos, las corrientes oceánicas, la
actividad volcánica y el desplazamiento del hielo de la Antártida.
Pero a parte de todos estos eventos naturales, los equipos
capturaron un extraño sonido que desconcertó a los científicos encargados del
proyecto. En 1997, al revisar y arreglar dichos micrófonos, se detectó en
las costas de Chile, a unos 5.000km de Iloca hacia
el oeste en el Pacífico sur, un sonido potente, en
principio pensaron que el sonido se ajustaba al perfil de un ser vivo, pero
para que una criatura pudiera crear este sonido tendría que haber sido mucho
más grande que una ballena azul, que se cree que es el animal más
grande que jamás haya vivido en el planeta.
El sonido desciende lentamente en un rango de frecuencia
casi sub-sónico (a partir de 40 Hz hacia abajo) durante aproximadamente 7
minutos y fue de amplitud (volumen) suficiente como para ser detectado por tres
sensores submarinos en las latitudes 95W, 8S, y 8N, alejados entre sí más de
5000 km. Se determinó que el origen del sonido estaba ubicado a las 15:30
GMT del 19 de mayo 1997 cerca de las siguientes coordenadas: 50° S 100°
W (un punto distante en el sur del Océano Pacífico, al oeste del
extremo sur de América del Sur frente a las costas de Chile).
Los investigadores, incapaces de identificar cualquier posible fuente de
sonido, lo apodaron ‘The Bloop’. Según una de las declaraciones oficiales
de la NOAA, decía:
“Los científicos determinaron que el patrón de onda indica
que fue hecho por un animal, pero para que un ser acuático emita un sonido que
puede viajar a más de 5.000 kilómetros, y contando la gran cantidad de ruido
oceánico, los científicos dicen que necesitaría un aparato de emisión de ruido
increíblemente grande, uno mucho más grande que el de la ballena azul. Mientras
que el audio del Bloop se asemeja a la de un ser vivo, el sistema lo
identificó como desconocido porque era demasiado fuerte: era varias veces más
fuerte que el sonido biológico más ruidos conocido.”
El estudio del Bloop se vio obstaculizado por el hecho de
que ya no fue captado desde el verano del 97. Algunos expertos, teorizaron
sobre si se pudiera tratar de criaturas no vistas que acechan en los océanos
profundos y oscuros, criaturas que son misteriosas y fascinantes.
Dicho animal desconocido pudo haber sido el culpable de
estos sonidos constantes a una profundidad inusualmente poco profundo. Pero la
realidad, es que a menos que los investigadores se encuentren con el sonido de
nuevo, no existe ninguna posibilidad de que pueda tener una explicación más
concreta que la propia especulación científica.
Aunque se especuló bastante con que la fuente de dicho
sonido fuese un animal submarino, ya fuere una especie desconocida
de pulpo o calamar gigantesco o de una nueva especie de
ballena gigante aún más grande que la ballena azul, ambas teorías han sido
descartadas, ya que no se conoce entre los cefalópodos sistemas que les
permitan emitir sonido, y las ballenas necesitan oxígeno y salen a la
superficie para conseguirlo, con posibilidad de ser observada. Ningún satélite,
barco, o avión pudo divisar al bloop.
Al final pareció ser consistente con
terremotos generados por grandes icebergs cuando se agrietan y
fracturan, aunque esto nunca pudo ser comprobado eficientemente.
Pero cabe mencionar que la NOAA tiene una gran cantidad de
grabaciones de sonidos no identificados registrados en el océano, como el
famoso sonidos metálico procedente del fondo del mar en las islas Baleares,
aunque este es otro caso. Pero el Bloop es la anomalía acuática más conocida,
sea por las reclamaciones de origen biológico o desconocido. Como siempre
ocurre en estos casos, la ciencia no aportará nada nuevo en el descubrimiento
de los misterios que rodean nuestro planeta, con un claro objetivo de
desacreditar la realidad.
COINCIDENCIA CON LA LITERATURA
El punto de origen del Bloop resulta
sorprendentemente cercano a la localización de la ficticia ciudad sumergida
de R'lyeh, que forma parte de la mitología de H. P. Lovecraft, con
obras como La llamada de Cthulhu (1926). Esto ha llevado a muchos de
sus seguidores a establecer relaciones entre este fenómeno y la entidad
llamada Cthulhu.
Cthulhu es una criatura extraterrestre, que tiene
características físicas y habilidades que le hacen algo parecido a un dios para
los humanos.
En la novela Las Montañas de la Locura pequeños
retoños de Cthulhu estuvieron en guerra con varias razas en un pasado lejano,
en el planeta Tierra. También lo adoran la mayor parte de los , seres
mitad humano mitad batracio, que habitan los océanos. Por encima de
los están los , aunque el universo de Lovecraft no se da a los
escalones jerárquicos. Según sus seguidores humanos Cthulhu es el sumo
sacerdote de estos seres.
Según la mitología, Cthulhu reposa soñando bajo
un en la ciudad sumergida de R´lyeh . Espera escapar algún
día (el día en que «Las estrellas estén de nuevo en posición») con la ayuda de
cultistas y sectarios para volver a extender su poder sobre la Tierra. A él
dedican el salmo "Ph´nglui mglw´nafh Cthulhu R´lyeh wgah´nagl
fhtagn"
que aproximadamente significa "En la Ciudad de
R´lyeh, el difunto Cthulhu, espera soñando".